Cada vez es más frecuente escuchar a los derechohabientes quejarse que en las instituciones de salud pública no proporcionan el medicamento que prescriben los médicos y se ven en la necesidad de comprarlos de su bolsillo para iniciar o continuar con el tratamiento.
De acuerdo a la investigación realizada por la periodista Peniley Ramírez, subraya que la escasez se debe a que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador cambió el sistema de adquisición de medicamento con el objetivo de evitar la corrupción y deducir los costos, pero el resultado ha sido desastroso.
Ahora la adquisición se realiza a través del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) con asesoría de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS, por sus siglas en inglés), antes lo concertaba el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
De acuerdo con el esquema que implementó esta administración, la compra se divide en abasto prioritario y regular, pero en la investigación se destaca que el proceso para la adquisición del abasto prioritario no va ni al 30 por ciento.
Por lo que destaca que en México se está una crisis de salud paralela al coronavirus.
Cabe mencionar que en las anteriores administraciones se contaba con un calendario específico para recopilar información sobre qué requerían las clínicas y los hospitales.
Un periodo para llevar a cabo las licitaciones y la adjudicación de las mismas para que las instituciones de salud contaran con los medicamentos y los insumos en tiempo y forma.
De acuerdo con avisos que obtuvo la periodista las licitaciones se han retrasado en más de una ocasión y las empresas postulantes no tienen claro de cómo va el proceso ni cuándo terminará.
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Pero otro punto que hunde más al sistema de salud en México es que se vive el peor momento de la pandemia por COVID-19, hay un retraso en el programa de vacunación y los procesos de compra de insumos no están ni en adjudicaciones ni en firmas de contratos.
Finalmente destaca que la administración obradorista debe a sus proveedores más de 2 mil millones de pesos, de lo que entregaron en medicamentos durante 2019 y 2020.