El presidente entrante de Perú, José Pedro Castillo Terrones, renunció a vivir en el Palacio de Gobierno de Lima.
«No gobernaré desde la Casa de Pizarro, porque creo que tenemos que romper con los símbolos coloniales para acabar con las ataduras de dominación que se han mantenido vigentes por tantos años», dijo en su primer discurso al país tras jurar al cargo en el Congreso.
«Cederemos este palacio al nuevo Ministerio de las Culturas para que sea usado como un museo que muestre nuestra historia, desde sus orígenes hasta la actualidad», afirmó Castillo.
Castillo, de 51 años, hizo este anuncio casi al final de un mensaje a la nación en el que prometió que impulsará una nueva Constitución, aunque insistió que no busca «estatizar» la economía del segundo mayor productor mundial de cobre.
El Palacio de Gobierno de Lima, a un costado de la Plaza de Armas en el centro de Lima, fue residencia de virreyes de Perú bajo el dominio español. Posteriormente, albergó a los libertadores José de San Martín y Simón Bolívar hace 200 años.
La ceremonia de fundación del Palacio de Gobierno de Lima se realizó el día 18 de enero de 1535, teniendo como primer inquilino el conquistador español Francisco Pizarro, quien sometió al líder indígena Atahualpa en Cajamarca, la tierra natal del ahora presidente Castillo.