Desde hace siglos se ha estigmatizado al murciélago; se le ha inventado historias que distan de su naturaleza; pero ahora, la industria del mezcal se ha convertido en uno de los principales enemigos del mamífero volador.
Aunque parezca increíble, es una situación real. Debido al auge de esta bebida ancestral, con el paso de los años su demanda está causando graves efectos a estos quirópteros.
Los murciélagos son una pieza clave para la producción del agave; planta de donde se obtiene el mezcal. Cabe destacar que el agave florece una sola vez, casi al final de su ciclo de vida y para esto produce un quiote que es fundamental en su proceso de reproducción.
Los “Leptonycteris Nivalis”, conocido como murciélago magueyero, participan en la polinización de esta planta al tener como alimento el néctar de estas flores, por lo que, cuando se cosecha prematuramente el agave, se interrumpe su ciclo de vida. La acción deja sin alimento a los murciélagos.
Pero el problema no solo queda ahí, sino que, también genera consecuencias negativas en la genética del agave, vulnerando su diversidad. La demanda de esta bebida ancestral ha orillado al establecimiento de monocultivos de agave; alterando los ecosistemas locales y reduciendo la biodiversidad en la zona.
Estudios indican que a partir de la industrialización del mezcal y la deforestación del agave la población del murciélago magueyero ha disminuido en un 50 %. Ya que para fabricar los destilados la planta es cosechada justo cuando inicia la floración. De esta forma se impide que los murciélagos puedan polinizarla pues no llegar a consumir el néctar que necesitan.
Otro factor que afecta la vida de los murciélagos es el uso recurrente de agroquímicos en estos plantíos impacta a la diversidad de especies incluyendo a los mamíferos y contamina el agua a nivel superficial y subterránea. Lo que en su momento formaba parte de un paisaje natural hoy se encuentra en riesgo ante el crecimiento repentino y voraz de la industria del alcohol.
El agave es una planta endémica de América y su distribución se extiende por gran parte del continente americano desde el sur de Estados Unidos hasta el norte de Sudamérica. Su hábitat se encuentra en el desierto y da origen a diversos destilados entre los que se encuentra el mezcal.