Una niña de cuatro años, identificada como Zoé, murió por asfixia luego que su cuello se atoró en una resbaladilla en la cual se encontraba jugando, ubicada al interior del kínder Rita Cetina Gutiérrez, en Querétaro, en lo que era su primer día de clases.
De acuerdo con las autoridades, la pequeña Zoé se encontraba jugando en el kínder, ubicado en la colonia Paseos de San Miguel, en la capital de Querétaro, cuando su cuello quedó atorado en las escaleras de una resbaladilla.
En primera instancia se dijo que la menor había caído al intentar descender del juego y se había golpeado la cabeza; sin embargo, las autoridades municipales confirmaron que Zoé falleció por asfixia.
Por otro lado, los testigos señalaron que el personal de la institución educativa perdió de vista a Zoé después del recreo, alrededor de las 11 de la mañana.
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Al pasar los minutos, el personal educativo se dio a la tarea de buscar a la niña y, algunos minutos después, hallaron que estaba atorada en las escaleras de la resbaladilla del kínder.
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