La lucha libre está de luto, Hulk Hogan, ícono del cuadrilátero profesional falleció a los 71 años. La noticia, que ha conmocionado al mundo del deporte y el entretenimiento, fue reportada inicialmente por TMZ Sports.
Según los informes, esta madrugada, 124 de julio, personal médico de emergencia acudió a la residencia de Terry Bollea, nombre real del ícono de la WWE en Clearwater, Florida. Los operadores de los servicios de emergencia indicaron que la llamada se refería a un “paro cardíaco”.
La escena frente a la casa de Hogan se caracterizó por la presencia de múltiples patrullas policiales y unidades de paramédicos, lo que generó preocupación entre los vecinos y la comunidad. El legendario luchador fue visto siendo trasladado en camilla a una ambulancia, lo que presagiaba la gravedad de su estado.
Este trágico desenlace ocurre apenas unas semanas después de que la esposa de Hogan, Sky, tuviera que desmentir públicamente los persistentes rumores sobre el deterioro de la salud de su marido. En aquel momento, Sky aseguró que su corazón estaba “fuerte” y que se estaba recuperando favorablemente de varias cirugías.
Los rumores sobre el “lecho de muerte” de Hogan habían sido alimentados por su ex amigo, Bubba the Love Sponge, generando una ola de especulaciones. Sin embargo, en ese momento, los representantes del luchador habían aclarado que Hogan solo estaba lidiando con los síntomas y el proceso de recuperación de una operación de cuello a la que se había sometido en mayo.
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La partida de Hulk Hogan deja un vacío irremplazable en el corazón de millones de fans y en la historia del entretenimiento deportivo, pero su legado como pionero y superestrella perdurará por siempre.